Daniel G. S.
4/5
Casa rural acogedora y rehabilitada, con buen precio en un pueblo muy tranquilo de apenas 500 habitantes.
Trato muy amable de la dueña/encargada y de los habitantes del pueblo en general con los que tratamos.
La casa consta de 2 plantas, la superior con una pequeña terraza, cocina completa, un baño completo y otro para niños, salón y hasta 9 plazas para dormir. La inferior tiene acceso a un pequeño patio con barbacoa, aunque sólo habitamos la superior (se alquila por plantas), por lo que no puedo opinar sobre las estancias inferiores.
La casa es espaciosa, estába limpia, en buen estado, con sábanas, toallas y mantas de sobra, bastantes accesorios para cocinar (aunque se habría agradecido que tuviera cosas básicas como algo de azúcar o aceite) y varios armarios para guardar la ropa. Tiene conexión a internet gratuíta.
Sin embargo vimos 3 pequeños problemas a la hora de la estancia.
Si se va a ocupar la mayoría o todas las plazas de la planta superior quizá un único baño completo se quede corto para tantas personas, el servicio de niños está habilitado para su altura por lo que apenas tiene practicable el lavabo. Hasta 4 personas no creo que supusiese mucho problema.
La otra gran pega es que hay una escalera que une la planta baja con la alta, separadas sólo por una puerta fina de madera, y al parecer el salón inferior está muy cerca de esta puerta, estando a su vez esta escalera demasiado cerca de las habitaciones superiores, por lo que se escuchan muchísimo las conversaciones de quien se hospeda en la planta inferior, pudiendo ser un problema bastante grave para dormir arriba si los vecinos de la inferior son muchos y se quedan hasta las tantas hablando, aun cerrando todas las puertas posibles (tuvimos este problema 2 noches). Una segunda puerta que aislase mejor ese tramo de escaleras sería bastante conveniente.
También las plazas de garaje (hay espacio para 3 coches contando el soleado superior y la propia calle) pueden quedarse muy escasas si se llena una planta entera o ambas de la casa, siendo necesario aparcar en las calles inferiores del pueblo.
A parte de estas valoraciones hay que tener en cuenta varios aspectos del pueblo y el entorno, no problemas en sí sino factores a tener en cuenta.
Decidimos esta casa rural y Castillonroy de cara a realizar varias rutas de senderismo en la Sierra del Montsec y del Parque Natural de Ordesa por su buena relación calidad/precio comparado con otros pueblos más cercanos a estas áreas, y por la relativa cercanía en coche. Es muy buen punto de partida para actividades de este tipo en las sierras de alrededor o en los mismos Pirineos tanto en la zona de Huesca como en la de Lleida. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el pueblo es muy pequeño, apenas dispone de comercios (un par de panaderías y una tienda muy pequeña de ultramarinos con el horario MUY limitado) y un bar en la plaza central del pueblo, por lo que para avituallarse es necesario hacerlo en Alfarrás o cualquier otro pueblo más grande con un poco de previsión.
También hay que tener en cuenta de cara a los vehículos que las calles de Castillonroy, especialmente en la que se encuentra Casa Rosalía, son MUY estrechas, y vehículos anchos directamente no caben a través de algunos puntos. Tengo un turismo bastante pequeño y apenas podía atravesar algunos giros por 3 o 5 centímetros, en todo terrenos o vehículos sólo un poco más grandes directamente no lo veo posible.
Es muy recomendable si se tiene un rato libre subir al famoso "mirador del Carro" en el cerro de lo alto del pueblo, con bonitas vistas.
En general tuvimos una estancia muy agradable en Castillonroy y recomendamos la visita.