Churrería Chocolatería - Comillas, Cantabria

imane E.

Hemos buscado churros por toda la zona en diciembre y acudimos ahí y tenían churros, estaban ricos, han sido rápido. Ninguna queja y a nosotros nos ha gustado.

Marcos A. G. R.

La peor experiencia de nuestro viaje, escasa comida y precios excesivos. Por culpa de este establecimiento nos hemos llevado un mal recuerdo de comillas.
Donde menos y peor hemos comido y más hemos pagado con diferencia.

Desgraciadamente leímos las reseñas tarde….

Prácticamente te obligan a pedir todo de una vez porque te dicen que si no tienes que esperar … creo que la realidad es que si ves los platos dejas de pedir.

Lo de la bebida y el pan un robo !!!

Alberto R. G.

Comimos el menú del día por 17 € y quedamos satisfechos.

Jesus A.

**Título:** Decepción total en Churrería Comillas: ¡Exigimos explicaciones!

Esta noche hemos visitado Churrería Comillas con la expectativa de disfrutar de una buena cena, pero lo que hemos experimentado ha sido una auténtica estafa. La experiencia ha sido nefasta y nos sentimos completamente engañados tras haber gastado 178,50 euros.

En primer lugar, las raciones eran ridículamente pequeñas, dejando a todos los comensales con hambre. A pesar de ser un establecimiento que supuestamente ofrece cenas completas, no nos sirvieron pan y además se equivocaron en una de las bebidas, la cual nos cobraron igualmente.

Lo más indignante ocurrió cuando uno de nuestros amigos pidió una "hamburguesa completa", descrita en el menú como un plato bien surtido. Sin embargo, la hamburguesa llegó sin ningún tipo de guarnición y estaba muy poco elaborada. Al solicitar hablar con la gerente para obtener una explicación, esta salió pero permaneció en silencio, sin ofrecer ninguna justificación.

Tras pagar la cuenta, insistimos en poner una reclamación. Primero, la gerente se negó a salir nuevamente y, cuando finalmente conseguimos la hoja de reclamaciones, el camarero se mostró completamente en contra de que la completáramos. Además, nos exigieron que rellenáramos sus datos nosotros mismos, lo cual es totalmente inaceptable.

Exigimos a Churrería Comillas una explicación por el trato recibido, así como por las deficiencias en el servicio y la calidad de los alimentos. Nos sentimos estafados y humillados por el lamentable trato recibido.

Aconsejamos a todos los turistas y locales que eviten cenar o comer en Churrería Comillas. Nuestra experiencia ha sido una auténtica vergüenza y esperamos que esta reseña sirva de advertencia para otros posibles clientes. Esperamos una respuesta adecuada a nuestra queja y que se tomen las medidas necesarias para evitar que esto vuelva a ocurrir.

Ana L. V.

Doy dos estrellas solo porque el camarero fue súper amable, pero deja mucho que desear el lugar.
El “chupito” de zumo de naranja más pequeño y más caro que me he tomado en mi vida. El sándwich, más de lo mismo, súper costoso y no valió la pena, además de que estaba frío.
No entendemos qué pasa en esta ciudad que todo es TAN caro y TAN malo.

Virginia D. S.

NO ACUDIR! Pésimo establecimiento! La encargada no da la cara, pedimos una hamburguesa de 10,50€ la cual no vale ni 3€, un carne escasa de poca calidad el pan del peor, ni siquiera 4 patatas para acompañar , pedimos explicaciones y soluciones y la encargada se queda callada sin hablar, los calamares nación escasa para el precio que tenían, por algo el local esta vacío, tiene la peor valoración de TripadVisor y unas reseñas pésimas, hoja de reclamaciones puesta para que dejen de engañar y estafar a la gente.

Pilar R.

Comimos ayer sábado 23 de septiembre dos personas el menú más barato de comillas a 16'50€. Nada que envidiar a otros menús que parecen estar de acuerdo en los precios. Buena terraza, buena comida y cantidad. Trato a destacar de Montse la camarera que nos atendió muy amablemente en todo momento. Destacar su tarta de queso hecha por ella. No puse foto de los postres, estaba tan buena que no me dio tiempo a hacerle foto.

Emma

Paramos aquí tras intentar comer en 5 o 6 sitios con mejor pinta y buenas reseñas, pero no había mesas sin reserva incluso empezando a preguntar pronto (a las 13:00) un martes de agosto. Y me senté, sobre las 14:00h, sin comprobar las opiniones de otras personas pero con la traquilidad de que nunca antes había comido mal en Comillas. ¡Error!. Es el típico sitio atrapaturistas, en la zona más céntrica de Comillas. Las raciones son caras para la cantidad y calidad que traen. Pedimos unas rabas (algo grasientas y escasas, pero fue lo mejor de la comida), una ensaladilla rusa insípida y muy escasa, unas croquetas congeladas pequeñas (las peores que he tomado en un bar, de las de bolsa de congelados del supermercado, venían 8 por el "módico" precio de 11€) y como no tenían pudin de cabracho, lo cambiamos por una sartén de huevos con patatas y morcilla (sartenes que te insisten en pedir, bajo pretexto de que luego, si te has quedado corto y pides algo más, tendrás que volver a esperar como si te hubieras acabado de sentar). Fue también la peor sartén que he tomado en un bar o restaurante: sin casi sabor, que mira que es difícil de conseguir echándole a algo morcilla. Me lo comí porque tenía hambre y de todas formas había que pagarlo. Para beber pedimos un par de copas de vinos (3€, correcto sin más, pero muy escaso de cantidad), un Aquarius (que al llegar a la mesa cambio de marca y era Aquarade, mucho peor) y un Nestea (que también cambió de marca, sin avisar, a Lipton). Los precios de dichos refrescos los vi ya en la cuenta: 3,80€, de los más caros de Cantabria y Asturias juntas. Visto lo visto, nos ahorramos el postre y el café y nos fuimos a una conocida heladería cántabra que teníamos a unos 2 metros de este local. Y como no todo es malo, diré que el personal era amable y diligente, no tardaron mucho en servirnos, a pesar de la afluencia de público y los baños estaban limpios para la gente que había, cosa de agradecer.