Disfrutar - Barcelona

David R.

Simplemente espectacular. Desde el primer al último pase. Escogimos el menú clásico, que conjuga una seleccion de los pases más conocidos desde que abrió, que entendimos que era el lógico si era la primera vez que íbamos.
Alguno como el pan chino relleno de caviar con crema agria es inolvidable.
Lo pedimos con maridaje, en el que nos llamó la atención algunos sherrys que hasta en Jerez son difíciles de encontrar.
Ojalá podamos volver y probar su menú Festival.
En cuanto a la decoración, es bonita pero más bien sobria o mínimalista, poniendo todo el foco en el disfrute del menú, lo cual me parece una acierto.
El servicio es impecable, son muy simpático y los someliers con los que tratamos eran muy tops.

Enhorabuena

Andrés V. P.

Una experiencia brutal! Tomamos el menú clásico con los platos mas icónicos del restaurante y todos y cada uno de ellos fueron sorprendentes. El servicio y la atención de todo el personal de sala también fue inmejorable. Creo que a pesar el precio elevado es una experiéncia que vale totalmente la pena si te apasiona comer y probar sabores y texturas diferentes.

Micaela O. M.

Esta era la segunda vez que iba a Disfrutar. La primera fue justo en la desescalada del Covid, y doy por hecho que el trauma pandémico me había atrofiado el gusto, porque esta segunda visita fue, directamente, un desastre. La comida no tenía ningún sentido: una vanguardia un tanto viejuna y basta, sin contexto ni narrativa, sin emoción. Ningún plato tenía alma.

Había demasiadas cosas que simplemente no están —ni de lejos— a la altura de un tres estrellas Michelin ni del “mejor restaurante del mundo”. ¿Un huevo frito con oro? ¿Un suquet servido en una taza de cappuccino? WHYYY?

El servicio, además, resultó tan robótico como el menú: mecánico, distante, frío. Parecían más programados para ejecutar una coreografía que para acompañarte en una experiencia gastronómica. No había calidez, ni complicidad, ni el más mínimo rastro de disfrute genuino por parte de quienes deberían guiarte en este viaje culinario. Y eso se nota.

Me lo pasé bien porque mi compañía era maravillosa, pero la experiencia fue decepcionante en todos los sentidos. La comida era mala, sin matices, sin magia, sin placer. Me dio pena, porque de verdad quería quererlo. Fui con expectativas altas, con ganas de rendirme ante la creatividad… pero lo pusieron casi imposible. No lo recomendaría a nadie, por desgracia.

Anahí F.

Después de esperar un año para poder conseguir una mesa en Disfrutar, por fin tuve la oportunidad de vivir la experiencia en octubre de 2024. La experiencia fue única, y sin duda, es uno de esos lugares que merece ser probado al menos una vez en la vida, pero debo decir que, aunque fue muy buena, no estuvo completamente a la altura de lo que esperaba.

Optamos por el Menú Clásico, que nos recomendaron para probar los platos más emblemáticos del restaurante. La técnica detrás de cada plato es impresionante, realmente se nota la destreza y la innovación en la cocina. Sin embargo, algo que me sorprendió fue que, a pesar de la técnica tan refinada, los sabores de algunos de los platos no fueron tan intensos como imaginaba. Hubo momentos en los que la presentación y la técnica destacaron más que la explosión de sabor que esperaba.

El servicio fue excelente. El equipo fue muy atento, explicando cada plato con detalle y respondiendo a nuestras preguntas con amabilidad y paciencia. Este tipo de atención realmente marca la diferencia, especialmente en un restaurante de este nivel.

El local también fue una grata sorpresa. Con una decoración muy curiosa y moderna, se mantiene alejado de ese aire elitista que suelen tener otros restaurantes de alta gama. El ambiente es acogedor y cercano, lo que hace que te sientas cómodo desde el momento en que entras.

En resumen, Disfrutar es una experiencia gastronómica que vale la pena vivir. La creatividad y la técnica están a la orden del día, pero creo que, en mi caso, el sabor de algunos platos no alcanzó las expectativas que tenía por el prestigio del lugar. Aun así, es un restaurante que ofrece una experiencia diferente y única, y sin duda, merece ser probado.

Elisabeth O. M.

Simplemente espectacular. Un año de espera pero bien merecido, no defrauda y se superan las expectativas. Platos creativos, originales y muy ricos!
El servicio muy atento, explicaciones a nivel de los platos. Y muy guay que de camino a la mesa te expliquen las diferentes zonas donde preparan la comida.
Si sigue a este nivel merecerá la pena volver en un futuro.

Cori B.

1 año de espera que sin duda hizo que mis nervios y mi emoción estuvieran a tope. Desde que entramos se sintió la calidez del servicio, la experiencia es totalmente DISFRUTABLE, cada platillo hecho con mimo, cuidado, profesionalidad y totalmente equilibrado, no saber elegir de entre 28 platos cual era el mejor, sin duda un trabajo exquisito de los chefs y del equipo de cocina, el servicio sin duda hospitalario, cálido te hacen sentir como si te conocieran de toda la vida siempre con simpatía, respeto y
educación. Me dedico a esta hermosa profesión y he de hacer mención que me he sentido reconfortada y cuidada , el trato y lo bien que comí ha sido memorable. Han creado un recuerdo inolvidable. Muchas gracias por su dedicación.

eva G.

Nuestra experiencia fue increíble!!
Sin duda, volveríamos a repetir la experiencia de sabores , de contrastes, de olores, de texturas… sin duda es algo que hay que vivir una vez!!
Yo soy celíaca y me adaptaron completamente los platos sin gluten , los camareros muy atentos y agradables!!
Muy buen trabajo a todo el equipo!!!

Juan ?. H.

Esta fue mi segunda visita a Disfrutar para probar el menú festival. Se combinan platos del menú clásico con nuevas creaciones de ese año. Fue una experiencia increíble y el servicio fue excelente como siempre.