Hotel Santa Isabel - Toledo, Toledo

DAVID M.

Un lugar encantador.
Desde que entras el primer día hasta que sales el último al personal no les falta una sonrisa , empezando por recepción, siguiendo por cafetería y terminando por limpieza personas amables y atentas para que tengas una buena estancia.
El desayuno, es el típico desayuno que hace sentirse como en casa.
Esta hubicado en un lugar perfecto, donde puedes acceder a cualquier lugar de la ciudad andando. Ha sido una gran experiencia y sin duda repetiremos.

javier B.

De lo mejor que tiene el hotel es la ubicación, está en el mismo centro de Toledo.
Tiene un tercer piso que si se sube de noche se puede ver la catedral toda iluminada y son una vistas espectaculares

Las habitaciones cómodas y grandes. Las camas muy grandes y amplias, dormimos mi hija y yo en una cama individual y muy cómodos estuvimos.

El servicio por parte de recepción fue maravilloso, al llegar nos atendieron con una amabilidad, un buen trato y una sonrisa en la cara.

Para volver

Patricia M. C. P.

Una ubicación excelente, la habitación y el servicio han sido impecables! Su terraza! Qué vistas!!!! Y hasta mesas y sillas para llevar tu metiendo o simplemente descansar disfrutando de un paisaje increíble! Lo recomiendo 100%. Si regreso, no dudaré en elegirlo!

Francisco P.

Un hotel con encanto, en el centro del casco antiguo, el único inconveniente es que para llegar la calle es muy estrecha, miden 1,90m así que un coche grande mejor aparcar abajo fuera de la zona verde que es para residentes.
En fin el hotel una pasada y en el 3er piso un mirador fantástico y por la noche iluminada la catedral, una maravilla. Hotel que mantiene la esencia de lo antiguo con mucho detalle, muy bonito.
Nos hemos tenido que ir sin desayunar, después de un buen rato esperando y 2 veces preguntando si venían a la mesa, no nos han tomado comanda y otra mesa llevaba más de 45min esperando y la señora ha contestado que lleva desde las 8 de la mañana trabajando y no había bajado nadie, en fin, incorrecta contestación, por ello al servicio le bajo la estrella, por lo demás bien.

Cristina L. R.

La ubicación es estupenda, estás en la catedral, eso sí ten en cuenta que algunas calles tienen un ancho justo para pasar si llegas en coche. Poseen parking, 14€ la noche, pero si es un coche de tamaño grande, no creo que pueda acceder.

El hotel en si está genial, todo muy bien calefactado y limpio. El personal muy agradable.
Además, posee un mirador, al que se accede sin ningún coste adicional. Unas vistas increíbles, qué no te olvide subir.

Muy recomendable.

juani S.

Nos ha encantado la experiencia en este maravilloso hotel. Tiene una ubicación espectacular. El personal es muy atento, tanto el personal de recepción mencionando con especial cariño a Juanjo, nos ayudó en todo lo que pudo, las chicas del comedor y el personal de limpieza. Todo maravilloso, repetiría sin ninguna duda.

Santiago C.

Lo primero a tener en cuenta es la ubicación. Si no conoces bien la zona, meter el coche puede ser un verdadero desafío. Personalmente, no lo haría de nuevo, ya que el espacio es bastante reducido y maniobrar resulta complicado, corriendo el riesgo de dañar el coche.

El hotel en sí está bastante bien. Tiene dos zonas, una más nueva y otra más antigua, pero esta última está en buen estado y ha sido reformada.

Nos alojamos en la buhardilla, que aunque pequeña, nos resultó muy acogedora, al igual que su baño. Nos gustó mucho en general.

Y un mirador magnífico, que se accede a él sin ningún coste adicional.

Los desayunos son impresionantes, muy abundantes y realmente merecen la pena. El personal es muy amable.

Como único inconveniente, a las 08:00 de la mañana sonó un móvil que no paró hasta pasados 20 minutos, y luego volvió a sonar. Finalmente, un huésped salió y de manera educada pidió que lo apagaran. Pensamos que podía ser del personal de limpieza. No fue algo grave, pero es un detalle que deberían cuidar más.

Por lo demás, una experiencia estupenda. Recomendable.

Lady G.

Muy contenta con mi elección.
Un hotel pequeño, muy cómodo y en pleno centro.
Desde la terraza en la azotea hay unas vistas preciosas.
El chico de la recepción muy agradable.
Volvería sin dudarlo.